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Parkinson Y Pilates

Beneficios de Pilates en casos de Parkinson

La enfermedad de Parkinson (EP) es la segunda enfermedad neurodegenerativa más común en el mundo y genera grandes gastos sociales y en la sanidad pública.

¿Qué es la enfermedad de Parkinson?

La enfermedad hace su aparición cuando las células del cuerpo cuya función es la producción de dopamina se detienen. La dopamina es un neurotransmisor del Sistema Nervioso Central que regula diversas funciones, como las relacionadas con el control del movimiento.

El deterioro causado por la EP se debe en gran medida a la disfunción motora que limita progresivamente la autonomía funcional del paciente.

¿Cuáles son los síntomas de la enfermedad de Parkinson?

Los síntomas comienzan de forma gradual. A veces, con un temblor apenas perceptible en una mano. Los temblores son habituales, aunque la enfermedad también suele provocar rigidez muscular o limitación del movimiento.

En las etapas iniciales de la enfermedad de Parkinson, el rostro puede tener una expresión leve o nula. Es posible que los brazos no se balanceen al caminar. El habla puede volverse suave o incomprensible. Los síntomas de la enfermedad de Parkinson se agravan a medida que esta avanza con el tiempo. Cuando aparecen los primeros síntomas, es recomendable consultar cuanto antes a su médico.

Ejercicio físico como terapia

Los avances terapéuticos médicos y quirúrgicos hasta la fecha han sido notables en la corrección de los síntomas de la enfermedad, pero no definitivos. Por esta razón, es importante evaluar los efectos del ejercicio físico debido a su bajo coste y la ausencia de efectos secundarios.

La evidencia científica muestra que los programas de entrenamiento con ejercicio físico tienen un efecto beneficioso sobre los síntomas motores como la marcha, el equilibrio, el riesgo de caída y la función física, así como los síntomas no motores, como la función cognitiva, los trastornos del sueño y la calidad de vida, en personas con EP.

¿Qué beneficios puede aportar Pilates?

Pilates es un enfoque de ejercicio mente-cuerpo, creado inicialmente por Joseph H. Pilates como un método de entrenamiento para personas que ya estaban en forma.

El conjunto original de ejercicios ha evolucionado hasta el punto que una interpretación moderna y sólida de Pilates puede aplicarse tanto a personas aptas como no aptas.

Para fines de rehabilitación, el método Pilates tiene como objetivo mejorar la postura y el control del movimiento a través de técnicas de control neuromuscular, que mejoran la estabilidad de la columna lumbar al apuntar a los músculos estabilizadores locales de la región lumbo-pélvica.

Hay dos formas principales reconocidas actualmente de practicar Pilates:

El primero es Pilates Mat, que se centra en la realización de ejercicios sobre una colchoneta en el suelo.

El segundo, generalmente conocido como Pilates Aparatos o Studio, se lleva a cabo por medio de aparatos que ejercen resistencia, como el reformer o el barril.

Un tema relevante en cualquier programa de ejercicio a largo plazo es su adherencia: Mantener la adhesión a cualquier programa de ejercicio es un desafío para las personas con EP debido a la existencia de varias barreras a las que deben hacer frente.

Por ejemplo, para motivar a esta población a hacer ejercicio, es importante que esperen obtener beneficios de su práctica. A este respecto, existe evidencia de que Pilates es una forma efectiva de ejercicio para pacientes con esclerosis múltiple, un trastorno neurológico que afecta la función motora y no motora, como en el caso de la enfermedad de Parkinson.

Otras barreras para el ejercicio incluyen la falta de tiempo y dificultades de transporte. En relación con esto, Pilates es una actividad que el paciente podría llegar a realizar de forma independiente en casa después de un período de entrenamiento adecuado.

Finalmente, la introducción de novedades en el programa de ejercicios ha sido considerada como un hecho importante que mejora la adherencia al ejercicio por parte de personas con EP. Además, los pacientes pueden sentir que Pilates puede ayudar a controlar los síntomas de su enfermedad y, por lo tanto, sentirse atraídos por el enfoque innovador de Pilates.

En resumen, Pilates se puede pautar de manera segura para personas con EP leve a moderada. La evidencia preliminar indica que su práctica podría tener un impacto positivo en la forma física, el equilibrio y la función física. Sus beneficios en la función de la parte inferior del cuerpo parecen ser superiores a los de otros ejercicios convencionales.

Nuestro centro, Alameda Studio, se caracteriza desde sus inicios en 2007 por el compromiso de ofrecer resultados y una mejora en la calidad de vida de todos nuestros alumnos a través de entrenamientos personalizados que combinan ejercicios de fuerza, equilibrio, respiración y alargamiento de la columna vertebral. Contacta con nosotros para una clase de prueba sin compromiso y una valoración previa.

Recuerda que antes de comenzar cualquier programa de ejercicios, es importante contar con la aprobación de tu médico.

 

Este artículo, "Beneficios de Pilates en la enfermedad de Parkinson", es un trabajo derivado de "Benefits of Pilates in Parkinson’s Disease: A Systematic Review and Meta-Analysis" usado bajo licencia CC BY.